Castillo de Travadell (Millena) CA-029

Localización:

 El Castillo de Travadell se encuentra localizado en las inmediaciones de la población de Millena, localidad perteneciente a la comarca alicantina de El Comtat y cercana a la localidad de Benillup.

Localización en Google Maps

Vista del Castillo de Travadell en Google

 Está ubicado en lo alto de un pequeño espolón rocoso a la derecha de la carretera CV-710 que une Millena con Benillup, pero más cercano a esta última localidad. A la derecha de una pronunciada curva a dos escasos kilómetros antes de entrar a Benillup, está el cruce con la carretera CV-706 hacia Cocentaina. Justo allí encontramos los restos de la fortaleza, bien visibles, a los que hay que llegar a pie desde la carretera por una senda al efecto.

 Esta cercanía de su ubicación con la ciudad de Benillup, donde se sitúan los restos de otro castillo, denominado de Billeneta, han dado algunas dudas en relación a su identificación histórica, especialmente respecto a si el denominado castillo de Billeneta fue el mismo que éste. De hecho, en la actualidad, los vecinos de estas poblaciones se refieren a este castillo, de forma indistinta, como de Travadell, de Millena, o de Billeneta, tal vez por el parecido de éste último nombre con “Milleneta”. No obstante este punto está totalmente contrastado y se sabe que se trata de dos fortalezas diferentes.

Localización en el mapa topográfico

Historia:

 La población de Millena es de origen musulmán y fue reconquistada por las tropas del rey Jaime I simultáneamente con otras poblaciones de la comarca a los árabes sobre el año 1.237. Inicialmente Millena fue una alquería musulmana fundada probablemente durante el siglo XII y a la finalización del mismo se cree que fue construida la fortaleza almohade.

 A la toma de la medina árabe, los moriscos habitantes de la misma no fueron expulsados de ella sino que continuaron viviendo allí, aunque durante el año 1.243 también fue repoblada con cristianos procedentes de Mallorca. Millena quedó incluido en las propiedades del marquesado de Guadalest y, más tarde, se incorporó a las pertenencias del Marqués de Ariza.

 A principios del siglo XVII, en 1.609, las revueltas moriscas provocadas por el decreto de expulsión de ese año acabaron con la población árabe de la población, toda vez que fueron a refugiarse al norte de la provincia, en los valles más inaccesibles, como Laguart, Ebo y Gallinera, huyendo del edicto de expulsión.

 Con ello, la población fue dejando el uso de la fortaleza, que poco a poco fue paulatinamente desmoronándose, ya que Millena no tuvo relevancia alguna en las hechos bélicos posteriores a esa fecha.

Escudo de la población de Millena

 Estado actual:

 Del castillo, en apreciable estado ruinoso, se distinguen importantes lienzos de muralla así como los restos de la torre del homenaje del recinto fortificado que, a tenor de sus ruinas, se puede afirmar que ocupaba una reducida superficie. Su fábrica no ofrece dudas pues el tapial árabe de algunos de sus paramentos le otorgan una cronología almohade, a primeros del siglo XIII.

 El castillo tiene planta de forma irregular, que se adapta a las diferentes cotas topográficas del espolón rocoso sobre el que se asienta. La superficie que ocupa es ciertamente reducida y se reconocen dos zonas: una queda situada sobre la cima de la roca que domina el territorio. La otra, queda situada en la zona contigua situada al norte sobre terreno menos escarpado. En los restos de la torre principal se observa una gran abertura en la que se situaba el acceso a las dependencias de la misma.

 Las construcciones se apoyan en la parte de la ladera que constituye el cambio de desnivel. Junto a la segunda área, la zona topográfica es más accesible, donde se vació un foso seco que lo separa del arranque de la ladera del cerro de mayor altura para completar el sistema defensivo de la fortaleza.

 En el interior, lleno de escombros y vegetación, se reconoce la existencia de diversas estancias y la presencia de un aljibe árabe. Dado el nivel de deterioro resulta complicado afirmar la forma de la planta, y sólo es posible asegurar que es muy irregular. Los muros son de tapial de mampostería fina con mortero de cal y grava, observándose también restos de paramentos fabricados con mampuestos de tamaño regular, con alguna hilada dispuesta en forma oblícua.

 Los aspectos ornamentales son inexistentes en la actualidad. Si hubo algún detalle está desaparecido u oculto en las capas de rellenos que alcanzan una potencia considerable. Se encuentra, como hemos apuntado, bastante arruinado, quedando tan sólo en pie tramos de muralla, estanto destruidas y desaparecidas todas las estructuras horizontales.

 Carecemos asimismo de información acerca de las estructuras superiores, tanto de las murallas como de la torre del homenaje, por lo que no podemos aventurar a decir que estaban almenadas, aunque por su procedencia almohade es muy probable que así fuera.

 Resumiendo, el castillo de Travadell corresponde a la fortificación principal para la salvaguarda de una alquería musulmana, situada en lugar estratégico como corresponde a las que se construyeron en la comarca, que se encuentra en estado semirruinoso y sobre el que urge una actuación de urgencia para, al menos, salvar los restos de la torre principal, o macho, y algunos elementos de la muralla circundante del recinto fortificado.

Galería fotográfica:

Visita efectuada el 09-10-17:

Aljibe árabe del castillo